Años después de que las últimas recreativas del barrio cerraran apareció el centro comercial de los cipreses, con su Sega Park. En este establecimiento se encontraban muchas máquinas modernas que no habíamos visto nunca, era una especie de salto al futuro. Entre las máquinas que se podían encontrar exista una muy peculiar, la del camión.
Para los malos estudiantes esta máquina era una preparación hacia el mundo laboral, era una recreativa que implicaba responsabilidades, llevar una carga a tiempo, aparcar un camión. Además, podias meterte en la piel de diferentes camioneros, el típico gordo, el negro amante de la música disco, la putita…
Esta máquina recreaba con gran fidelidad la conducción de un camión, ya que te sentabas en ella, con su volante gigante de camión, dos marchas y los pedales. Te sentabas y te creías el rey de la carretera.
El desafío era hacer la ruta perfecta, llevar tu carga sin daños en el menor tiempo posible por rutas escabrosas llenas de curvas y de domingueros tocapelotas, no era una misión sencilla ya que conducías un vehículo de varias toneladas, donde podías escoger distintas cargas según tu pericia al volante. Además, si te pasabas la pantalla tenías un bonus, aparcar el camión. Esto que parece sencillo no lo era en absoluto y muchas veces perdías los puntos extra del bonus.
Teníamos un amigo que se lograba pasar la máquina con 20 duros, era el auténtico amo de los trailers.
no lo conozco
ResponderEliminarq buena , una de las mejores maqinas sin duda
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