Nuestra querida lectora Ainhoa Iban Coscoño nos ha proporcionado un informe resumido de una investigación que está haciendo sobre nuestro querido Barrio Garrido. Sin ánimo de menospreciar su inteligencia, quizá no se hayan dado cuenta de una de las mayores peculiaridades de nuestro barrio. Yo se la voy a contar, para que vayan planteándose, ya que ustedes son el futuro, como solucionar esto de aquí a unos años...
La peculiaridad a la que me refiero es ni más ni menos que el efecto conocido como “ausencia de superficies horizontales de apoyo trasero o Lema de la obligatoriedad del estado vertical de Shin-Shi-Tioh”. Basicamente, en los espacios de ocio de garrido NO existen zonas para sentarse. Ya puede ir usted al vialia, a los cipreses o al cortingles, por ejemplo, que o paga algo en un bar, o ha elegido estar en pie.
Esto no ha sido siempre así. Como explica nuestra lectora, en un momento dado, en el centro comercial de los Cipreses, las enormes macetas de las plantas tenian una plataforma para que la gente se sentara. Muy poco tiempo despues de su inauguración, los propietarios tuvieron que cortarlas debido a que hordas de “garridenses fundadores”, ustedes me entienden, pasaban todo el día sentados al calorcito, llenando el centro y sin consumir, lo cual no daba buena imagen a los posibles y jovenes clientes. En los bancos quedo un pequeño saliente que el investigador de campo y ayudante de nuestra lectora, Martín Valiente Posadera, comprobó que era imposible permanecer sentado mas de 7.8 segundos sin sufrir dolor de nalgas.
Si ustedes se fijan en los lugares a los que me refiero y posiblemente en muchos otros, observarán todo aquello que les he narrado.
jueves, 25 de marzo de 2010
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